Mary Corylé, inspirada y rebelde
(Cuenca, 24 de mayo de 1894 – Ibídem, 07 de mayo de 1976) |
Los hombres,
esos con vísceras de oro…
de hierro…
de lodo…
me increparon un día:
“Tú no cantas sino al amor.
Hay cosas bellas para cantarse”.
esos con vísceras de oro…
de hierro…
de lodo…
me increparon un día:
“Tú no cantas sino al amor.
Hay cosas bellas para cantarse”.
del Prólogo de Canta a la Vida
María Ramona Cordero León, conocida por su seudónimo Mary Corylé, nace en Cuenca el 24 de mayo de 1894. Perteneció a una familia donde se apreciaba el arte y la literatura. Sus padres solían escribir versos y educaron a sus hijos en un entorno intelectual y culto. Se sintió atraída por la poesía, la narrativa, la historia, el teatro y la música; campos en los que desarrolló su obra.
Una mujer rebelde que no se ajustó a los modelos que se establecían para las mujeres de su época; se atrevió a dejar a un novio en el altar, a vivir sola y a escribir sobre temas polémicos. Su poesía y narrativa está marcada por una clara alusión a símbolos sensuales, eróticos, feministas, de protesta y denuncia. Fundó la Biblioteca Municipal de Cuenca, institución de la que fue directora, además, ejerció la cátedra de Literatura.
No pertenezco a ningún círculo literario ni asociación letrada, por cuanto creo que el arrebañamiento es propio de animales pequeños. Mary Corylé (1953)
En 1933 llega a la capital donde colabora con textos para los diarios y revistas de varias ciudades; además, trabaja como secretaria en la Embajada de México, en el Museo Colonial de Quito, fue secretaria y directora del Archivo Histórico. Su interés y entusiasmo la llevaron a aprender paleografía, catalogación, entre otros para poder desempañar sus labores. Escribió narrativa, ensayo, novela, poesía, biografías, entre otros géneros. También tuvo un programa en HCJB, La Hora radial.
Algunas de sus obras son: Canta la vida (1933), La Pancha, Pobre Chapita y Padre (1934), El mío romancero (1945), Romancero de la Florecíca (1946), Mundo pequeño (1948), Romances fechos laureles, Gleba, Tres mujeres máximas en la literatura nacional y Federico González Suárez (1952), Aguafuertes (1954), Nuesa Cuenca de los Andes. Romancero (1957), Dotora Sancta Teresa (1962), Medardo Ángel Silva (1963), Así nacieron los jembes (colibríes) (1965), El cóndor del Aconcagua (1964), Romancero de Bolívar (1971), Romance del amor cañari y Alma de los ríos cuencanos (1974), Del soneto inmortal y Marietta de Veintemilla (1977), Cantos de amor a Cuenca y Montalvo (1982), Hombres y mujeres de América (1983), Poesía y relato (1994).
Mary Corylé supo representar el espíritu de una mujer libre en todo el sentido de la palabra, vivió y amó intensamente, se enamoró de las letras y también de uno que otro hombre. Su último amor fue el doctor Guillermo Garzón Ubidia de quien conservaba cada carta que enviaba. El siglo XX fue suyo y al llegar los años finales de este, ella tras dejar un gran legado supo partir. Muere en Cuenca el 07 de mayo de 1976.
Ximena Flores Venegas
21-05-2021
Fuentes
Rodas, Raquel. (2012) Mary Corylé poeta del amor. Ministerio de Cultura del Ecuador.
Audaz la autora. ¡Bravo por eso!