Arturo Borja Pérez
Arturo Borja Pérez, nace en Quito, el 15 de septiembre de 1892. Hijo del intelectual Luis Felipe Borja Pérez (padre) y de Carmen Amelia Pérez y Chiriboga. Desde niño se interesa por la poesía. En París a donde viajó por motivos de salud en la adolescencia, aprovechó para tomar un curso de literatura, leyó y tuvo contacto con Mallarmé, Baudelaire y Rimbaud, aunque su poeta preferido era Verlaine.
Es uno de los representantes del modernismo ecuatoriano. Publicó en revistas literarias de inicios del siglo XX; tradujo además algunos textos de sus autores preferidos. Mantuvo amistad con varios de los poetas y escritores de la época.
“… despidieron a Arturo Borja cantando elegías y cubrieron su sepulcro con rosas y poemas”. Así se describe el entierro del autor de “La flauta de ónix”, el más musical de los modernistas y también el que de todos ellos murió más joven. Borja tenía veinte años cuando murió a causa de una sobredosis de morfina. Dejando desolado a su gran amigo Ernesto Noboa y Caamaño, a su joven esposa con el dolor de haberlo visto morir.
“Un juego deleitoso de imágenes y musicalidad”
“Su vida, breve y precoz, se había hundido en profundo pesimismo, nostalgia y tristeza, ya que anhelaba el ambiente intelectual de una Francia a la que, bien sabía, no le sería dado volver”.
Es recordado en Ecuador como “el primer poeta que agitó en los albores del siglo XX la bandera de un nuevo estilo de hacer poesía”. Líder indiscutible del movimiento modernista en Quito.